
Según nos informan el Tomate Running "esta carrera es especialmente interesante por el enclave espectacular que tiene, veredas entre el bosque y las ruinas de su medieval castillo iluminado para la ocasión. Las vertiginosas bajadas entre piedras y con menos de cinco metros de visión también le daban un plus de atracción (cuando no miedo).
Llegamos todos sanos y salvos a meta, donde nos recibieron los afectuosos voluntarios con un reconstituyente caldito y otros alimentos. La organización y la gente que ayudaba merecían otro podium, por nuestra parte le damos un 10".